En una noria

Ha entrado el Otoño, me fastidia esta estación. En estos días pareciera que voy en una noria, un momento arriba, el otro abajo, arriba, abajo, arriba, abajo...

La semana pasada, la segunda de cole, terminó con un balance de...pongamos 9,5. Superbien. 

La casa al día, incluso la plancha, increíble

Las horas de sueño, del peque y mía, cumplidas.

Tardes de parque, juegos con amigos, cumplido.

Colaboración (Reunión del Colectivo, con el peque incluido, un poco de concienciación de esta maravilla)

Actividades de ocio de fin de semana, cumplido y más que cumplido. Con amigos, con nosotros, con la abuela. Fuimos al parque, a un taller de percusión en Latidos (encantados los dos), a una sesión de Jugar con ritmo (muchos amigos juntos y se lo pasaron bomba), a un espectáculo de flamenco para niños de La Bienal (didáctico, entretenido...ni pestañeó), paseíto por la ciudad

La visita a la familia, cumplida

El blog actualizado

La visita a los blogs amigos, renqueando pero en ello

Los cursos, no tengo lo que hay que tener para que el Corel me funcione y sin el programa a ver que hago.

La dieta...ejem, ejem...todo no puede ser, pero ahí vamos.

El lunes David no protesta por ir al cole y entra feliz. Perfecto. Eufórica, para que vamos a decir lo contrario. Vuelvo a casa para desayunar, abro el ordenador, reviso el correo, un email de una amiga para presentar su nuevo blog. Ya es oficial, se van a vivir fuera, coño, es en firme, me entra la tristeza y alá!!!! a llorar. Me desahogo, me recompongo. Paso a los blogs, llego al de Eloisa, siempre en el corazón, un niño de apenas cinco años ha muerto, no puedo entenderlo, de nuevo la congoja. ¿Cómo pararla? Paso a otro registro, me absorben las tareas, buenas noticias del Árbol de los Chupetes, parece que habrá apoyo institucional, de nuevo la euforia. Me llego al banco, reviso la cuenta, va pa´abajo que hecha humo, vuelvo a la realidad. Unos whastaps, una amiga necesita alguien para cuidar a su bebé y hacer algo en la casa, ¿quizás pueda ser yo? una pizca de ilusión, quizás mejor no mezclar amistad y trabajo, ya veremos. La abuela paterna no está muy bien, cada vez peor, me apena, por ella, por Jesús, por su familia, por David, por mi misma. Así es la vida, mierda de vida. El peque vuelve del cole feliz, ¿cómo no estarlo con él?.

Un nuevo día, sin protestas por el cole. El día otoñal total, con lo que me entristecen. Cojo la bici y voy pensando en una persona desaparecida del mapa. Me reúno con Marga y su marido. Encantadores y divertidos, paseo por el parque en bici, mejor imposible, de nuevo arriba. Recojo al peque, de nuevo juntos, felices ambos. Un mensaje, se mueve el encuentro de Barcelona, me encantaría ir, no tengo un pavo. Arggggg. Veremos luego. Una llamada, buscan a mi madre con urgencia, del ginecólogo, quieren verla, esperábamos unos resultados. Me entra la angustia, malas noticias seguro. Lo de Barcelona ya no es importante, queda en stand by. Momento pánico. Hablo con mi madre...el ginecólogo no tenía los resultados, los recoge ella, todo bien. De nuevo arriba. Me cago en la leche los de la clínica que no tienen gente y quieren pasar tarjeta. Poco más y nos matan del susto. me peso, 68, ¡anda, he perdido!, no está mal. Pra cenar tapa y copita de vino, dos, estoy que me caigo, duermo como los ángeles. Con lo que está pasando, soy ajena.

Otro día, de los malos, malos. Gris, fresco, húmedo. ¿Lloverá? Llueve. No podré ir a la reunión del Colectivo, quería conocer a una nueva amiga, otra vez será. Con esta humedad mi suelo, nunca muy brillante, se torna opaco. La casa está "limpia" pero parece triste. Me pongo triste. Se me pasan los minutos y no avanzo. Me agobio. La mesa se pegada al suelo, cuesta arrastrarla, una nimiedad que me molesta sobremanera. Seguirá así hasta que vuelva el calor. ¡Con lo que queda! Llueve, con la falta que hace, no me gusta. Recojo a David, vuelve mi sonrisa. Mamá, los niños me tocaban con el dedo el robot de mi camiseta, les he dicho que no lo hicieran más que me iba a hacer una agujero y se me iba a enfriar el ombligo. Jajajajajajaja, carcajadas. Ya no estoy triste. Un sin parar. Siesta (de el). Se lo lleva mi madre a merendar. Conduzco sola, con MI música ¡cuanto tiempo!. Estoy bien. Lo recojo, parque de bolas. Charlas y deshaogos, una amiga también está de capa caída, será el tiempo, mal de muchos...Baño, cena. Tenemos visita. Muy agradable, se pasa volando. Un helado y a dormir, que ya es hora. Ni fu ni fa. Mañana será otro día, pero esa es la tónica

...arriba y abajo, arriba y abajo, arriba y abajo...como en una noria