¡Qué diatriba!

Diatriba. Esa es la palabra que se me vino a la mente cuando puse la cabeza en la almohada pensando sobre el cole de David. 

Hace una año unos amigos tenían que elegir colegio para su niña. Estaban hechos un mar de dudas y nosotros, viéndolo muy lejos, "la mar" de tranquilos porque todavía faltaba un año. Pero el año ha pasado en un periquete y nos ha tocado HACER LA LISTA.

Tenemos la suerte de tener muchos colegios muy cerca de casa, a ver: como cinco colegios a unos cinco minutos andando y tres más digamos a diez minutillos. 

Unos públicos, otros concertados. Unos laicos, otros religiosos. Unos de curas, otros de monjas. Unos con uno sistema educativo más "actual", otros más "tradicionales". Unos con buena infraestructura, otros no tanto. Unos con buenas instalaciones deportivas y otros pues como que no. Unos con buen ambiente, otros con mala fama. De todo hay en la viña del señor.

Para nosotros no ha sido difícil elegir en qué colegio nos gustaría que estudiase David. Nuestra elección es uno de los que está a cinco minutos de casa. 

Es público y por tanto laico, aunque pueden escoger tener clases de religión. 

Con aula matinal y comedor (aunque en principio no necesitemos esos servicios). 

El profesorado es joven y aunque sufre algunas variaciones de año en año no es de los que cambia toda la plantilla cada curso. Trabajan por proyectos. 

Es el único público de Sevilla que es plurilingüe. Tienen inglés y francés. A partir de 5 años, los niños que son de inglés reciben tres materias en ese idioma y además francés como asignatura. Los de francés a la inversa. Nos gustaría que David fuera de francés, porque el inglés es un idioma mucho más accesible fuera del cole, mediante actividades extraescolares, películas, series, libros, campamentos...Suponemos que así saldrá del cole con dos idiomas, suponemos, repito.

El edificio es muy luminoso y lo reformaron hace poquitos años. Sólo hay dos clases por curso, así que se supone que los peques estarán controlados.

Tienen actividades extraescolares variadas, unas ofertadas por el propio colegio y otras por el AMPA que parece que funciona bien.

Piden mucho la implicación de los padres, por lo menos en infantil. Eso para mi es muy importante y como pueda me meto en el AMPA de cabeza.

Hay diversidad de culturas en el alumnado, bueno, depende también del año, pero creo que eso es muy enriquecedor para los niños.

Tenemos muy buenas referencias de otros padres que tienen allí a sus peques y también de gente que trabaja en la Junta de Andalucía en educación. 

No nos gusta que a los 12 años tengan que pasar del cole al instituto pero todos los alumnos de este colegio tienen la plaza garantizada en un instituto que está a tres minutos de casa. Sigue la misma línea educativa, siguen los mismos compañeros, vamos, que lo que cambia es el edificio. En teoría algo de continuidad en el cambio.

Esa es nuestra elección, pero el problema viene ahora. 

No quiere decir que vaya a entrar en ese cole. 

Para los que desconozcáis el sistema (como yo hace un año). Hay que elaborar una lista con cuatro colegios más, por orden de preferencia. Pero claro, si no entra en la primera opción sólo pasa a la segunda si es que ese cole tiene plazas libres, o sea, tu vas detrás de las familias que hayan pedido ese cole como primera opción, si quedan plazas entra tu peque, si no a la tercera opción en la que irías después de los que lo pidieron como primera y como segunda opción. Entonces, la primera opción es muy importante, pero es que las demás no lo son menos. ¡¡¡¡¡¡UFFFF!!!!, ¡qué lio! 

Pero es que en realidad todo es cuestión de suerte. Supongamos que el cole tenga 50 plazas y que ese año sólo lo pidan 49. Ajá, todos para adentro y sobra una. Puede que lo pidan 60 pero que tú estés dentro de las 50 familias que tienen el máximo de puntos (por cercanía del domicilio, del trabajo de los padres, de la renta, si existe minusvalía, familia monoparental y algo más habrá), uhy, entra. Que no estés dentro de ese grupo. Siguiente opción, el segundo cole, que pongamos que oferta 75 plazas y que lo piden 74. Si tu eres el primero en reserva la plaza es tuya, sino pasa palabra...Podía seguir hasta el infinito y más allá pero es que esto es un rollo.

Vamos, que al final nos tocará o no ese cole por sorteo. A ver si en esto tenemos suerte.

Mejor esperamos hasta primeros de Mayo "con las carnes abiertas" porque sea como sea es una cuestión decisiva para el futuro de nuestros peques. O quizás no tanto y los padres nos "rayamos" demasiado.